Hace poco fuimos a una manifestación por un vecino que creemos que está encarcelado injustamente. No hubo disturbios, no se entorpeció el tráfico (casi todo el camino fué por calle peatonal), ni siquiera se pateó una papelera. Nos seguían varias camionetas de antidisturbios y a las pocas cuadras se apresuraron a detener violentamente la manifestación.
Era una manifestación de jóvenes de izquierda (mayormente, aunque había gente de todas las edades).
Estos días se estan produciendo manifestaciones de vecinos xenófobos, que no quieren que en su barrio vivan gitanos. No es una reclamación política, sino económica: tienen miedo de que sus pisos puedan bajar de precio. Amén de que quieren que los marginales se queden para siempre al margen. En estas manifestaciones no hay antidisturbios, en cambio los acompañan unos cuantos policías locales que van cortando el tráfico para dejarlos pasar. Incluso ví como delante mío unos de estos «manifestantes» saltaban encima de un coche que intentaba salir por una calle lateral, abollándolo seguramente, pero nadie les dijo nada ¡y estábamos en frente de la jefatura de policía! la intención era cortar completamente el tráfico en la avenida con mas caudal de la ciudad (la marina).
Así es, hay distintas clases de manifestantes. Ya todos lo sabemos. Si reclamas por el uso de español tienes carta libre, si reclamas por el gallego hay porra libre. Si reclamas segregación la calle es tuya, si reclamas libertad y justicia es asociación ilícita.
(Sobre al maniobra de reubicación de chabolistas intentaré escribir en otro momento, porque el problema es mas de fondo)
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